La discusión sobre el mercado a futuro de la soja sigue abierta, así lo confirmó ayer Alberto Fernandez. Con respecto al principal conflicto, el de las retenciones móviles, Fernandez manifestó que "no son un problema" y culpó al paro del campo del mes pasado por la "consecuencia espantosa del aumento enorme de precios" de los productos de la canasta básica.
Lo cierto es que al gobierno le vino como anillo al dedo el paro para tener un culpable en los desmedidos aumentos, que el INDEC sigue negando.
Hoy habrá una nueva reunión en la que el jefe de Gabinete no participará, pero anticipó que el gobierno no aceptará las amenazas de los dirigentes rurales - haciendo alusión a las declaraciones de los ruralistas donde advierten la posibilidad de un nuevo paro - Además advirtió que si hay un nuevo paro, los ruralistas deberán atenerse a las consecuencias.
Después de la reunión de ayer el responsable de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, comunicó que en el encuentro Fernandez "reconoció que están mal las retenciones, y por ello prometen y reconocen que hay que modificarlas". Esto fue desmentido más tarde por el jefe de Gabinete.
Entre dimes y di retes el conflicto con el agro continúa y no hay miras de nuevos acuerdos, por lo pronto hoy continúan las reuniones para tratar de encontrar una solución.
miércoles, 7 de mayo de 2008
¿No son un problema?
Publicado por Antonela Canicais en 9:42
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